Los eventos híbridos combinan presencia física y transmisión en línea; para que funcionen, la planificación debe contemplar: calidad técnica (audio/video), interacción remota (preguntas en vivo, moderación), y experiencia en sitio (señalética, puntos de encuentro).
Checklist esencial: 1) confirmar ancho de banda y pruebas técnicas; 2) plan de contingencia para fallos de audio/video; 3) roles claros para moderación y apoyo técnico; 4) agenda adaptada para audiencias remotas; 5) mecanismos de networking online (salas temáticas, chat moderado).
Aplicar estas prácticas reduce fricción y permite que el evento llegue a audiencias más amplias sin perder calidad de experiencia.